por Stephen D. Ricks
Maxwell Institute – Provo, Utah.
Parte 2:
La siguiente pregunta que podría venir entonces es, ¿como fue este método de traducir el Libro de Mormón?. Los medios de traduccion que tenemos en la discusion son: La piedra del vidente, los intérpretes y el pectoral. ¿Y que acerca del método? Explico Jose como el hizo para traducir el Libro de Mormón?.
Lamentablemente, en este caso tampoco nos proporciona más información acerca de cómo el Libro de Mormón fue traducido asi como no lo hizo con la pregunta acerca de los medios que el uso. Él solo dijo que ocurrio por el poder y don de Dios. Esto es particularmente desafortunado debido a que sólo José, en este caso particular, estaba en condiciones de describir cómo realmente funcionaban los instrumentos, donde otros fueron solo capaces de describir algo para nosotros, con cierto detalle y precisión acerca de como Jose o los instrumentos parecian funcionar. Sin embargo, al menos dos compañeros de trabajo de José, gente que fue testigos del proceso de traducción, han hecho declaraciones sobre cómo José habría realmente traducido el Libro de Mormón.
Uno de ellos fue David Whitmer. Al final de su vida, en respuesta a algunas declaraciones que se estaban haciendo en relación a él y los primeros dias de la Iglesia, David Whitmer escribió un discurso a “todos los creyentes en Cristo”. Escribio acerca de una serie de diferentes temas que inciden en la historia temprana de la Iglesia, pero también habla un poco acerca del proceso de traducción. Y esto es lo que dice sobre esto:
“Ahora voy a dar una descripción de la manera en que el Libro de Mormón fue traducido.
Jose ponia la piedra del vidente en un sombrero, cerca de su cara para suprimir la luz. Ahora bien, esto es en cierta manera parecido a lo que alguien podría hacer si estuviera mirando a través de un microscopio, o inclusive por medio de prismáticos. Uno tiene que eliminar la luz para poder ver.
Entonces, el dice:
“En la oscuridad la luz espiritual podria brillar. Un trozo de algo parecido a pergamino aparecieria y en este apareceria lo escrito. Un caracter a la vez apareceria y bajo esta estaba la interpretación en inglés. El hermano Jose leia el Inglés a Oliver Cowdery, quien era su escriba principal y cuando era escrito y repetido al Hermano José, para ver si era correcto, entonces desaparecería, y otro trozo con interpretación apareceria. De este modo, el Libro de Mormón fue traducido por el don y el poder de Dios y no por ningún poder del hombre“.
Se trata de una interesante declaración. Me gustaria volver a ella porque hay mucho en ella que es interesante.
Ahora recordemos que Martin Harris pasó muchos años de su vida fuera de la Iglesia, sin nunca variar en mucho su testimonio acerca de la Iglesia y en ninguna cosa su testimonio acerca del Libro de Mormón. Hacia el final de su vida tuvo una conversacion con Edward Stevenson, quien fue miembro del Primer Quórum de los Setenta, el que le ayudó a volver al evangelio y lo llevó a Utah, donde pasó el resto de sus días. Edward Stevenson tuvo numerosas entrevistas con Martin Harris acerca de esos grandes acontecimientos que tuvieron lugar en los primeros días de la restauración y escribió acerca de esto. Edward le hizo muchas preguntas acerca de la aparicion del Libro de Mormón y obtuvo una declaración de Martin en relación con la forma en que el Libro de Mormón fue traducido por José, la cual me parece extremadamente interesante y que vale la pena considerar por un momento.
Esto es lo que Edward Stevenson dice en relación con la descripción hecha por Martin Harris:
“Con la ayuda de la piedra del vidente, las frases aparecieron y fueron leidas por el profeta y escritas por Martin. Y cuando terminaban decian ‘escrito’ y si estaba correctamente escrita la frase entonces desaparecía y otra aparecia en su lugar. Pero, si no estaba escrita correctamente permaneció hasta que era corregido el error, de manera que la traducción se hizo del mismo modo en que se grabaron sobre las planchas, precisamente en el lenguaje que ellos usaron”.
Bueno, esta es una declaración muy interesante. En primera instancia vamos a examinar esta última parte de la declaración. Aqui señala que Jose podia leer lo que estaba escrito en la piedra del vidente, o los interpretes nefitas. Si era correctamente escrito por el escriba, entonces ellos podrian continuar. Pero si no estaba correctamente escrito él podia corregirlo. Nosotros podemos ver en el manuscrito original del Libro de Mormón, del cual aproximadamente una cuarta parte se encuentra aun en existencia (y que ha sido en los últimos años muy estudiado por Royal Skousen), que hay casos en los que una palabra, especialmente un nombre, está escrito de una manera y luego es tachado y es escrito de una manera ligeramente diferente.
Me puedo imaginar en aquellos momentos en que José estaba leyendo una palabra tratando de pronunciarla correctamente. La persona que está actuando como escriba lo escribia como el pensaba que debia ser correctamente escrita. Pero, en algunos casos, lo escribió en una manera que no era muy correcta, por lo cual José, que podía ver lo que estaba escrito, corregía la ortografía y, a continuación, después de corregirlo seguía traduciendo. En algunos casos esto es especialmente interesante, ya que estas correcciones tienen sentido solo a la luz de estos nombres como procedentes del antiguo Cercano Oriente y no podrian haber sido detectado como errores de sentido como nombres para personas que unicamente tenian una experiencia como conocedores solo del idioma Ingles.
En un caso particular, me gustaria notar de un nombre que fue escrito originalmente con un “ck” al final de la misma. José, sin embargo, hizo que el nombre se corrigiese en las ultimas letras desde el “ck” a “ch”. Podemos ver en el manuscrito original como el “ck” esta tachado y se escribio el “ch” encima. Ahora bien, posiblemente para nosotros la forma en que se puede pronunciar un nombre con una “ck” o “ch” al final es practicamente indiferente ya que es el mismo sonido, algo asi como un “k”. Pero en el hebreo y en muchos otros idiomas que están relacionados con él, hay una gran diferencia entre el uno y el otro. Representan dos totalmente diferentes letras o sonidos.
Ademas el dice algo que creo que tambien es muy interesante. La traducción es del mismo modo en que se gravaron sobre las planchas, precisamente en la lengua que fue utilizada. El explica que se debe a que las frases que aparecen, y que fueron leídas por el profeta y a continuación, escrito por Martin Harris, en este caso particular, o por Oliver Cowdery en otros momento, desaparecería después de haber sido escrito correctamente. Creo que esto nos puede proporcionar informacion acerca de la forma en que la traducción se llevó a cabo, pero no nos dice necesariamente toda la historia. Ademas aqui puede haber algunas ideas erradas tanto de David Withmer como de Martin Harris acerca de como ellos suponian que las escrituras son reveladas que quizas no eran correctas. Quiero decir con “erroneas” la idea de que cualquiera cosa que Jose reciviese era directamente de la mente de Dios a la mano de José.
Ahora, quiero dejar muy claro que es mi firme convicción de que el Libro de Mormón es de origen divino. Por otro lado, me parece que Jose estaba profundamente involucrado en el proceso de traducción en una serie de aspectos importantes. Una de estas fue, en mi opinión, de que José tuvo que tomar decisiones en cuanto a algunas palabras particulares que se usarian en la traducción al Inglés. Yo creo que probablemente fue asi, porque como ustedes probablemente recordarán, en la segunda edición de 1837 del Libro de Mormón, se realizaron numerosos cambios en el texto del Libro de Mormón en Inglés. Cambios realizadas por Jose o bajo su dirección. Ahora bien, si José hubiese pensado que todo en el Libro de Mormón vino directamente como Dios se lo había revelado a él entonces no hubiese tenido ninguna posibilidad de cambio, debido a que después de todo, esto es totalmente y absolutamente la palabra de Dios, entonces no estoy seguro de que él hubiese estado dispuesto a realizar cambios de cualquier tipo.
Además, creo que la participación de José en todo este proceso de traducción, se sugiere por lo que encontramos en la novena sección de la Doctrina y Convenios. Hay que recordar, Oliver había también un gran deseo de participar, no sólo como escriba, sino también como traductor, y así el pide el don de traducción el cual tambien se le entrega. Sin embargo a Oliver el Señor le dijo, “He aquí, no has entendido; has supuesto que yo te lo concedería cuando no pensaste sino en pedirme”.
Por lo tanto, Oliver debió haber pensado: “Todo lo que tengo que hacer es decir Yo quiero traducir” y las palabras me van a llegar. Ahora bien el Señor le dice que no, no es esa la forma en que funciona; El sigue diciendo: “debes estudiarlo en tu mente; entonces has de preguntarme si está bien; y si así fuere, haré que tu pecho arda dentro de ti; por tanto, sentirás que está bien”. Una vez más, tengo la impresión de que Oliver se imagino que el proceso seria algo asi como “Si yo pregunto, el don me será entregado, y teniendo el don, entonces no se requiere un esfuerzo particular de mi parte, me basta con utilizar a los intérpretes, o la piedra del vidente y voy a tener la posibilidad de traducir”. El aprendio que era algo mucho más complicado el proceso real de traduccion.
Estos versiculos, en mi opinión, sugieren que se requiere de un esfuerzo por parte del traductor; de un real y verdadero esfuerzo. Para buscar, para encontrar la expresión adecuada, algo que no hubiera sido el caso si se tratase simplemente de algo revelado directamente de Dios a la mente y de ahi a la pluma del traductor.
Hay algunas otras pruebas, en mi opinión, de la idea de que estoy proponiendo aquí, de que hubo un verdadero esfuerzo por parte de José, que el no estuvo simplemente escribiendo lo que recibia a su mente directamente sino que se veia en la necesidad de elaborar ideas que se le daban para traducirlas a un Inglés correcto y aceptable al expresar los conceptos del texto original.
Tenemos registro de un ministro contemporáneo a Jose, que fuera bastante conocido, tanto por sus actividades en la Iglesia reformada Alemana, así como por haber sido un dedicado enemigo de la restauración. Su nombre era Deitrich Villers. El escribió a dos de sus colegas en York, Pensilvania en relación con el crecimiento de la Iglesia e incluye dos o tres declaraciones que son de lo más interesantes. Suponemos aquí, por supuesto, que no estan escritos desde el punto de vista de un creyente, sino simplemente como uno que esta reportando lo que la gente en ese momento esta diciendo.
Él dice, “El ángel indico que bajo estas planchas estaban escondidos los interpretes, sin lo cual no se podía traducir las planchas, y que mediante el uso de estos instrumentos, Smith estaría en condiciones de leer estas lenguas antiguas, los cuales el nunca había estudiado y que el Espíritu Santo podria revelarle a el la traducción en el idioma Inglés”. Vamos a leer lo último de nuevo, porque creo que esto es muy interesante. Él dice que con el Urim y Tumin (los instrumentos) Jose “estaría en condiciones de leer estas lenguas antiguas, los cuales el nunca había estudiado y que el Espíritu Santo podria revelarle a el la traducción en el idioma Inglés”.
Según un academico que escribio comentando lo anterior: “Por lo tanto, la traducción al Inglés fue, según informes contemporáneos, un producto de las impresiones espirituales que recibió José, más que una traducción automática al idioma Ingles. Esto haria de José Smith, a pesar de sus limitaciones gramaticales, un traductor, de hecho, más que un mero transcriptor de la palabra escrita de Dios”.
Este es el escenario en que me gustaría sugerir que a Jose se le dio, a través de la inspiración (a través del Urim y Tumin, que es la piedra de vidente o los interpretes nefitas), los medios por los cuales el pudo comprender las palabras y las ideas, y la relación entre estas palabras e ideas, desde el idioma original en que se encontraban las planchas. Pero, José tuvo la responsabilidad de escoger de los significados que el entendio en su mente la traduccion del idioma original a un correcto inglés.
Aquellos de nosotros que han tenido la experiencia del aprendizaje de una segunda lengua pueden saber que es posible llegar a un punto en que uno ya no tiene que traducir a partir de esa segunda lengua a su idioma nativo a fin de ser capaces de entenderlo. Es posible simplemente leer un documento y comprender sin la traducción palabra por palabra al idioma propio.
Pero también es un hecho que ese mismo proceso de traducción, cuando se requiere realmente expresar esas ideas que uno puede entender en el idioma original pero sin traducción al idioma nativo (ingles), es mucho más complicado cuando tiene que ser expresada en un inglés correcto. Uno podría ser capaz de leer un documento en francés y ser capaz de entenderlo muy bien, pero si a uno se le pide traducirlo en forma escrita al Inglés, entonces podría requerir un verdadero esfuerzo. Lo mismo es válido si se tratase de un documento en español, un documento en alemán, en hebreo y, desde luego, un documento en el idioma o lo que sea que uno escoja.
Puede ser bastante facil de entender el significado de algo en el idioma original, las ideas pueden entenderse. Y si se pidiese que proporcionare algún tipo de precision, es decir, un breve resumen de lo que dice, sería sencillo. Pero si uno tuviese que tratar de entregar una correcta y razonablemente buena traducción literal de los documentos, entonces existe una verdadera dificultad. Se necesita esfuerzo, a veces una gran cantidad de esfuerzo. [nota de admin: Es la pura verdad….]
Ese es el esfuerzo, creo, que está siendo contemplado por el Señor en la sección 9 de Doctrina y Convenios. Oliver tiene que entender que el tiene que estudiarlo en su propia mente, a fin de ser capaz de traducir con éxito. Las palabras se son utilizadas por Jose son sus propias palabras, aunque las ideas son proporcionadas por la inspiración del Señor, porque, por supuesto, no tenía realmente la oportunidad de aprender el idioma lo suficientemente bien para que él hubiera sido capaz de traducir por si mismo las planchas.
Bueno, yo creo que si entendemos el proceso de traducción de esta manera, una en la que José tuvo que utilizar su propio esfuerzo para pasar la traduccion a un ingles correcto con el sentido de las ideas originales y en una manera aceptable y correcta, entonces, creo que podemos entender el siguiente paso del proceso, de acuerdo a como es mencionado tanto por Martin Harris, así como por David Whitmer, es decir, que cuando una traduccion aceptable habia sido pensada por Jose Smith en su mente, entonces esta apareceria en el Urim y Tumin y podria ser leida y escrita.
Ahora podríamos hacernos la siguiente pregunta: ¿bueno, entonces no sería posible para alguien hacer una traducción diferente? Y la respuesta es absolutamente sí. De hecho, George Albert Smith, quien fue miembro de la primera presidencia y un miembro de los primeros quorums de los Doce (ordenado en 1839), así que conocio personalmente a José, dice que habría sido posible traducir el Libro de Mormón a varios otros idiomas, posiblemente con numerosos cambios en el lenguaje, y todavía tener el sentido del original expresado correctamente. En la clase de idiomas que yo enseño, se que si tuviera que pedir a un grupo de media docena de estudiantes que tomasen un mismo texto y lo tradujeran al inglés, podria tener seis traduccion diferentes, pero cada una de las cuales podría ser aceptablemente precisa en el sentido de la original.
Entonces el decir que hay una sola manera de traducir un texto, es algo que probablemente por la naturaleza de los lenguajes sea algo incorrecto. Numerosas formas son a menudo puestas a disposicion, cada una de las cuales y con aceptable precisión, expresaran las ideas del original. Si otra persona hubiese traducido el Libro de Mormón, tengo la impresión de que algunas de las palabras podrían haber sido diferentes, o que a veces la sintaxis hubiera sido un poco diferente, pero el sentido del texto no podria ser cambiado en la medida en que esa persona traduce a través de la inspiración del Señor.
Ahora me gustaría leer algunos comentarios que fueron hechos por Emma relativos el proceso de traducción que van más allá del tema, metodo, medios o instrumento usado sino que nos proporcionan algunos datos muy interesantes en un contexto más amplio de la traducción de José. Ya hemos mencionado una en la que está respondiendo a la pregunta acerca de cómo Jose tradujo.
Ahora me gustaría señalar otra cosa que nos dice de su propia experiencia, cuando actuó como escriba. Ella dice, a una persona que está haciendo una pregunta acerca de la traducción: “Cuando mi marido hacia la traducción del Libro de Mormón, yo escribí una parte de esta”, (y debemos tener en cuenta que hubo mucha gente que trabajo en la traducción como escribas, aunque el que escribió la mayor parte de lo que tenemos ahora como el Libro de Mormón fue Oliver Cowdery).
Ella dice, “Yo escribí una parte asi como él dictaba cada frase, palabra por palabra, y cuando llegó a los nombres propios no podía pronunciar frases largas, el las deletreaba poco a poco. Y mientras yo estaba escribiendo, si cometía un error de ortografía, el me detenia y corregia la ortografía”(precisamente lo que hemos visto mencionado por Martin Harris en relación con el proceso de traducción),” aunque era imposible para él ver lo que estaba escribiendo en ese momento”.
“Habia algunas palabras que el no sabía cómo pronunciarlas, incluso palabras como Sarah o Sariah, y tuvo que deletrear cada una de ellas” y ella se las pronunciaba. “Cuando se detenia por algun motivo, el podia, cuando comenzaba de nuevo, comenzar donde habia dejado el texto sin vacilar o tener alguna duda, y una vez mientras estaba traduciendo se detuvo de repente, pálido como una hoja, y dijo: Emma, Jerusalén tenia murallas?. Cuando le respondí que sí, él respondió, Oh, me temo que me enseñaron mal”. Ella escribe “Él tenía un conocimiento limitado de historia, que ni siquiera sabía que Jerusalén estuvo rodeada de murallas”.
Bueno, David Whitmer dice algo muy similar sobre este mismo evento. “Cuando, en la traducción, por primera vez se habla da Jerusalén como una ciudad amurallada, se detuvo hasta que tuvo una Biblia y pudo ver que este hecho estaba registrado, Smith no creía de que se tratase de una ciudad amurallada”.
Bueno, Emma dice otras cosas a mi juicio maravillosas, en el curso de una larga entrevista que tuvo con su hijo, José Smith III, con su segundo marido, Bidemon, y varios otros. Esta entrevista, que apareció en el “Saints Herald” en 1879, sólo poco antes de su muerte, se compone de preguntas y respuestas. Me gustaría leerlo para ustedes, porque, una vez más, nos proporciona un importante y hermoso conocimiento del Libro de Mormón y un gran testimonio sobre la persona que conocio a José mejor que nadie y que estuvo más cerca que nadie de él en el tiempo en el cual el Libro de Mormon fue traducido.
La primera pregunta es:”Es el mormonismo verdadero?”
Y ella respondio: “Yo sé que el Mormonismo es verdadero y creo que la Iglesia ha sido establecida por dirección divina. Yo tengo una completa fe en esto. Cuando escribia para tu padre, a menudo escribía día tras día, a menudo sentado en la mesa cerca de él, mientras el dictaba, hora tras hora, sin nada entre nosotros.”
Siguiente pregunta fue: “El no tenia un libro o manuscrito desde el cual el leia o te dictaba?”
Su respuesta: “Él no tenía un libro o manuscrito para leer de el.”
Pregunta: “¿Podría haberlo tenido y que usted no se hubiese dado cuenta?”
Respuesta: “Si el hubiese tenido algo de ese tipo no hubiese podido habérmelo ocultado.”
Pregunta: “¿Esta segura de el que tenía las planchas en el tiempo en que tu estuviste escribiendo para el?”
Respuesta: “Las planchas solían estar sobre la mesa sin ningún esfuerzo de ser ocultadas, envuelta en un pequeño mantel de lino que le había dado para poner dentro las planchas. Una vez senti las planchas, cuando estaban en la mesa y toque sus bordes y formas. Parecían ser flexibles como el papel grueso y emitian un ruido metalico cuando los bordes eran movidos con el pulgar, asi como a veces ocurre cuando se pasa un pulgar por los bordes de un libro.
Pregunta: “¿Donde escribieron padre y Oliver?”
Respuesta: “Oliver Cowdery y tu padre escribieron en la habitación donde yo hacia mis trabajos.”
Pregunta: “No podria haber dictado padre el Libro de Mormón a ti, Oliver Cowdery y los otros que escribieron para él después de haber escrito o haber leído algunos de los libros que existían?”
La respuesta aquí es bastante fuerte, pero creo que es un punto muy importante. Ella dice: “José Smith no podía ni escribir ni dictar una carta en forma coherente, y menos aún dictar un libro como el Libro de Mormón. Y ademas yo fui una participante activa en lo ocurrido y estuve presente durante la traducción de las planchas, y tenía conocimiento de las cosas tal y como sucedieron, es una cosa maravillosa para mí, una maravilla y una maravilla tanto como para cualquier otra persona “.
Pregunta: “Debo suponer que usted podria haber descubierto las planchas y examinarlas.”
Su respuesta (esto creo que reflexiona sobre su propia fe en una manera interesante): “Yo no intenté manipular las planchas como otros han dicho, ni descrubrilas para mirarlas. Yo estaba convencida de que era un trabajo de Dios y, por tanto, no sentí la necesidad de hacerlo.”
En ese momento su marido, Major Bidemon, le preguntó, “¿Te prohibió el Sr. Smith examinar las planchas?”
Y su respuesta fue: “No lo creo. Yo sabía que el las tenia y no fui especialmente curiosa acerca de estas. [Y me encanta esta parte de su respuesta.] Yo las movia de lugar a lugar en la mesa conforme me era necesario para hacer las cosas de mi hogar.
Bueno, otra parte de la misma entrevista creo que también refleja un poco de su testimonio, y nos proporciona alguna información sobre estos acontecimientos.
Ahora le pregunta su hijo Jose III: “Madre, ¿cuál es su creencia sobre la autenticidad o el origen del Libro de Mormón?”
Y su respuesta fue: “Mi creencia es que el Libro de Mormón es de autenticidad divina. No tengo la menor duda de ello. Estoy convencida de que ningún hombre podría haber dictado la escritura de los manuscritos a no ser que fuese inspirado. En efecto, cuando actué como su escriba, su padre dictó para mí, hora tras hora, y cuando regresamos después de las comidas, o después de una interrupción, comenzaba en el lugar donde lo había dejado, sin ver el manuscrito, sin pedir que le leyera una pedazo del mismo, esto era lo habitual. Habría sido poco probable que un hombre pueda hacer esto, y para uno indocto como fue el era simplemente imposible.
Bueno, hay otros grandes testimonios de la labor de José de la traducción, también. Otro que me gustaría leer aquí es David Whitmer quien nos indica el espíritu con el que José tuvo que hacerlo. No debemos imaginar que José podría hacerlo automáticamente. Ya hemos visto de la historia de Martin Harris que se trataba de una piedra muy especial que fue designada como la piedra del vidente, por lo que tenía que tener un espíritu apropiado para poder usar la piedra o los intérpretes.
David cuenta esta historia: “Una mañana, cuando José estaba disponiendose a seguir en la traducción, algo salió mal en la casa, y José estaba preocupado con ello. Algo que Emma, su esposa, había hecho. Oliver fue arriba y Jose subió poco después para continuar la traducción, pero no pudo hacer nada. No podía traducir una sola sílaba. Se fue abajo, hacia la huerta, y suplicó al Señor. Él se fue por alrededor de una hora, volvió a la casa, pidió perdón a Emma, y luego fueron arriba, donde estabamos, y la traducción comenzo bien de nuevo. Él no pudo hacer nada a menos que fuese humilde y fiel”.
También muchas otras cosas se puede decir de la traducción. Sólo un par, sin embargo, con las que me gustaría terminar. En primer lugar, no sea que nos imaginamos que este proceso de traducción es una simple cosa, algo que cualquiera sería capaz de hacer, me gustaría proponer la prueba que el hermano Hugh Nibley ha sugerido para cualquiera que desee llevar a cabo esto. Hasta la fecha, por cierto, no se de nadie que la halla tomado, aunque el Libro de Mormón ha tenido muchos que han cuestionado su autenticidad divina.
Esto es lo que él sugiere en algunas de sus clases de Libro de Mormón:
Dado que José Smith fue más joven que la mayoría de ustedes [por supuesto, se estaba refiriendo a un grupo de estudiantes de BYU], y no tan experimentado o bien educados como alguno de ustedes en el momento en que él registró los derechos de autor el Libro de Mormón, no debería ser demasiado el pedirles que escriban para el final del semestre (lo que en realidad les da más tiempo del que José tuvo, ya que casi todo el Libro de Mormón se hizo dentro de un espacio de unos 84 días más o menos), un documento de algo asi como 500 a 600 páginas.
Llámelo un libro sagrado si quieren, y denle la forma de una historia. Hablen de una comunidad de viajeros judíos en tiempos antiguos. Tiene que tener todo tipo de personajes en su historia, y su participación es en todo tipo de vicisitudes públicas y privadas. Darles nombres, cientos de ellos, pretendiendo que son verdaderos nombres en hebreo y egipcio de alrededor del 600 AC Deben ser generosos con los detalles técnicos y culturales, usos y costumbres, las artes y las industrias, las instituciones políticas y religiosas, ritos y tradiciones. Incluyan una larga y complicada historia militar y económica. Hagan que su narrativa pueda cubrir miles de años sin grandes lagunas. A la vez debe mantener una serie de historias locales. Siéntanse libres de introducir controversias religiosas y filosóficas en el debate, siempre en una forma realista.
Observen las convenciones literarias apropiadas y expliquen la obtención y la transmisión de sus variados materiales históricos. Por encima de todo, nunca se contradigan a ustedes mismos. Porque, ahora llegamos a la parte realmente difícil de esta tarea. Usted y yo sabemos que es usted el que esta creando todo esto, es una pequeña broma entre nosotros. Pero al mismo tiempo, deben publicar su documento no como una ficción o novela, sino como una historia verdadera.
Después de haberlo entregado no puede hacer cambios en él. En esta clase siempre uso la primera edición del Libro de Mormón. Ademas de todo deben invitar a cualquiera y a todos los estudiosos a leer y criticar libremente su trabajo, explicando a ellos que se trata de un libro sagrado a la par con la Biblia. Si parece demasiado escéptico, podría decirles que tradujo el libro de registros originales con la ayuda del Urim y Tumin. Además, para disipar sus dudas, podría decirles que el manuscrito original estaba en planchas de oro y que el que les paso las planchas era un angel!!!.
Asi que ahora, id a trabajar y buena suerte.
Consideren que esta fue la tarea de Jose, y que preciso fue para cumplirlo.
Sidney Rigdon, reflexionando sobre sus experiencias en los primeros días de la Iglesia, recordó en abril de 1844 algo que creo que es de más interesante y revelador. Él dice, “Yo recuerdo en el año 1830, cuando estaba en con toda la Iglesia de Cristo en una pequeña, antigua casa de madera de cerca de veinte metros cuadrados, en Waterloo, Nueva York, y empezamos a hablar sobre el reino de Dios como si hubiéramos tenido el mundo a nuestro alcance. Hablamos con mucha confianza. Hablamos grandes cosas. A pesar de que no eramos muchas personas teniamos grandes sentimientos. Sabíamos hace catorce años que la Iglesia se convertiría en una tan grande como lo es hoy. Éramos tan grandes entonces como vamos a llegar a ser. Sin ver este pueblo (Nauvoo), nosotros vimos en la visión de la Iglesia de Dios algo como un millar de veces más grande, aunque no eramos mas que unos granjeros. Todos los elderes, todos los miembros, se reunian en una conferencia en una pieza de no mas de veinte metros cuadrados. ”
Yo prefiero pensar que Sidney y otros primeros miembros de la Iglesia también tuvieron una visión, no sólo de los años de la Iglesia en la década de 1840, sino que de nuestros días, y habian previsto el tipo de crecimiento que hemos tenido. Pero no es sólo el crecimiento que viene a través de los números lo que estamos buscando, sino que es la fuerza de cada uno de los miembros que viene a través de sus testimonios. Estoy seguro de que esta es una de las razones por las que los presidentes de la Iglesia, más recientemente el Presidente Benson, han subrayado la importancia de leer y estudiar el Libro de Mormón debido a que no hay mejor manera en que podemos ser fuertes en la Iglesia y obtener los testimonios que nos permitan actuar en el cumplimiento de nuestra parte del plan de salvacion que a través del Libro de Mormón.
Considero el Libro de Mormón como uno de los grandes regalos que han sido dados por Dios para esta dispensación. Asi como la restauración es una gran parte de “una obra grande y maravillosa” que fue profetizado por Nefi, una parte muy importante de esta “obra grande y maravilloso” es el Libro de Mormón. Confío en que vamos a tomar en serio nuestra obligación de leer y estudiar, que vamos a empezar a apreciar cuán grande es esta maravilla, tanto en la forma en que salió, como en lo que el libro tiene para decirnos. Ruego que lo leamos, lo estudiemos, lo tomemos en serio en nuestras vidas, y que podamos crecer a través de él, en el nombre de Jesucristo, Amén.
Simplemente al leerlo y seguir su guia es suficiente para saber que es verdad y procede de Dios, ahora reflexionando en la forma de su traduccion, son ciegos y sordos los que tratan de criticarlo y desacreditarlo, El Libro de Mormon es un gran testimonio de la iglesia y de la divinidad de nuestro Señor JC, amo este libro y esta obra
gracias por este articulo
Jajaja me da risa la nota del Admin cuando estan trtando de explicar la diferencia entre traducir y entender un lenguaje que no sea el nativo… cuando me piden en casa que vaya traduciendo un dialogo en ingles de la tele (generalmente el canal Gringo) o una cancion… me quedo asi de … esq si le entiendo pero como lo digo en español?? me tengo q querdar pensando y luego se me adelantan los hablantes jajajaja. Concuerdo con eso es muy dificil traducir algo que se entiende
Genial…
¡¡ Cuántas veces he entendido perfectamente leyendo en inglés pero si me piden explicarlo en buen castellano… ahi comienzan mis problemas !!! Jajaj y aunque, en general, mi castellano es mas que aceptable diria yo. trato de idear un resumen lo mas fiel al original, pero igual… mas de algo bueno se me pierde .
Saludos!
Adjunto mi pequeño y humilde testimonio de que realmente sé que José Smith fue un profeta de Dios aunque no haya estado detrás de los árboles cuando el vió a Dios el Padre y Al Hijo. El Libro de Mormón es la palabra de Dios. En el nombre de Jesucristo, Amén.
Johnny M.
Amen, Johnny, Gracias por compartir tu testimonio con nosotros.
buenisimo conocer todos estos detalles. soy cristiano de nacimiento y miembro sud desde los 11, cuando por vez primera lei en el libro de mormon un sentimiento de su veracidad y de origen divino lleno mi alma y aun conservo asi. que digan miles de cosas sus criticos, pero para el buscador sincero de la verdad sera su tesoro, uno es con la biblia, testigos del amor de Dios. Su espiritu divino, su aparicion maravillosa, su inspirada traduccion trae el sosiego a un corazon sincero en busca de la verdad de la vida en esta jornada terrenal. gracias
Es sorprendente la influencia que puede ejercer el Libro de Mormon en nuestras vidas y como al escudriñarlo y seguir sus preceptos nos acercamos mas al Señor. Realmente AMO el LIBRO DE MORMON. Se sin ninguna duda que es verdadero y que fue traducido por el oder de Dios.
…Cuan grandiosa es esta obra…!
Hola buenas noches, muy lindo aporte, PERO considero que hay MUCHA apostasia en esta traduccion, o en este mensaje (No es mi intencion ofender a nadie) sobre que se uso la piedra de cristal en el sombrero no hay evidencia legítima de ello, es una mal interpretacion de ellos…
La evidencia muestra que José Smith tenía en su posesión una piedra de cristal que él encontró mientras cavaba un pozo en compañía de su hermano Hyrum para un señor Clark Chase, cerca de Palmyra, New York. Oliver Cowdery dijo sobre su rol en la traducción del Libro de Mormón: “Escribí con mi propia pluma el Libro de Mormón completo (salvo unas pocas páginas), así como salió de los labios del profeta José Smith, mientras él traducía por el don y poder de Dios, por medio del Urim y Tumim, o, como son llamados en ese libro, ‘intérpretes sagrados’” (Roberts, Comprehensive History of the Chuch, 1:128-29).
“Ni José Smith ni su escriba principal, Oliver Cowdery, mencionaron una ‘piedra de cristal’ en el trabajo de la traducción, pero repetidamente indicaron el uso del Urim y Tumim” (Book of Mormon Reference Companion, página 712). José Smith declaró que tradujo el Libro de Mormón “por medio del Urim y Tumim… por el don y poder de Dios” (History of the Church, 4:537).
El Urim y Tumim fue descrito por José como un “instrumento curioso…que consistía en un juego de piedras transparentes en un aro, aseguradas a un pectoral” (History of the Church, 4:537; véase también José Smith – Historia 1:59). La madre de José, Lucy Mack Smith, describió el instrumento así, “consistía en un juego de dos diamantes de tres esquinas suaves colocados en lentes, y los lentes colocados en aros de plata, que estaban conectados uno al otro de la misma manera que los espejuelos tradicionales” (Smith, Biographical Sketches, página 101).
En 1887 David Whitmer dijo que José Smith utilizó una piedra de cristal, así como también el Urim y Tumim mientras traducía el Libro de Mormón. Los objetores del Libro de Mormón consideran la declaración de Whitmer sobre el sombrero y la usan para que José parezca místico e involucrado en alguna práctica oculta en su época. Pero, cuando se ve el contexto, la declaración de Whitmer no es mística. En su libro Address to all Believers in Christ, declaró:
“A veces cuando José intentaba traducir, miraba dentro del sombrero donde estaba puesta la piedra (para no admitir la luz), él se daba cuenta que estaba ciego espiritualmente y no podía traducir. Nos dijo que su mente pensaba demasiado en las cosas terrenales, y varias razones le impedían continuar con la traducción. Cuando estaba en esa condición, salía y oraba, cuando se humillaba bastante ante Dios, entonces podía continuar con la traducción. Ahora vemos cuán estricto es el Señor, y cómo requiere que el corazón de un hombre primero esté en lo correcto, antes que pueda recibir revelación de Él” (Roberts, Comprehensive History of the Church, 1:130-31).
Por su declaración sobre el sombrero y la piedra de cristal, es claro que Whitmer se refería al delicado proceso de revelación y no se enfoca en magia o en lo oculto. Pero los detractores del Libro de Mormón no se cansan de discutir sobre la piedra de cristal y el sombrero misterioso.
Joseph Fielding McConkie y Craig J. Ostler, en su libro Revelations of the Restoration, dan seis razones porqué el relato de Whitmer sobre la piedra de cristal usada en un sombrero para traducir el Libro de Mormón, no se puede tomar en serio como evidencia concluyente del proceso de traducción. Extensamente se cita el trabajo de McConkie y Ostler, precisamente porque es lo que se ha encontrado en esta investigación. Es lo siguiente, que José Smith usó el Urim y Tumim para traducir el Libro de Mormón en lugar de la piedra de cristal que tenía en su posesión.
McConkie y Ostler escriben que el relato presentado por David Whitmer, sobre el proceso de traducción, claramente contradice los principios establecidos por el Señor en la Sección Nueve de Doctrina y Convenios. También está en desacuerdo con los testimonios de ambos, José Smith y Oliver Cowdery. MacConkie y Ostler concluyen que no es una fuente confiable en este asunto. Ellos respetan y agradecen totalmente por que David Whitmer agregó su nombre como parte del testimonio de ser uno de los Tres Testigos de la veracidad del Libro de Mormón y su origen divino. Sin embargo, esto no lo hace a él un testigo competente del proceso de traducción. Igual que la explicación de David Whitmer, se debería recordar que no hay ningún registro que conste que él haya visto el Urim y Tumim alguna vez, o que haya traducido algo. Su testimonio sobre cómo fue traducido el Libro de Mormón simplemente es un rumor.
Cook escribió que por un período que abarca veinte años (1869-88), algunos setenta testimonios registrados sobre la aparición del Libro de Mormón sostienen a David Whitmer como su origen. Estos relatos estaban llenos de inconsistencias. Ellos registraron repetidas veces que Whitmer había dicho, que después de la pérdida de las 116 páginas, el Señor le quitó al Profeta ambas cosas , las planchas y el Urim y Tumim y que nunca las regresó. En su lugar, Whitmer afirmó, que el Profeta usó para el proceso de traducción, una piedra de cristal de forma ovalada, color chocolate, un poco más grande que un huevo. Entonces, cada cosa que tenemos en el Libro de Mormón, de acuerdo a Whitmer, fue traducido al poner la piedra color chocolate en el sombrero, en el cual José habría metido su cabeza hasta cerrar el paso de la luz. Mientras hacía esto, él podía ver “un pedazo alargado de pergamino, en el cual los jeroglíficos aparecían,” y debajo de la escritura antigua, la traducción sería dada en inglés. José entonces leería esto a Oliver Cowdery, quien a su vez lo escribiría. Si él lo hacía correctamente, los caracteres y la interpretación desaparecerían y serían reemplazados por otros caracteres con su interpretación (Cook, David Whitmer Interviews, páginas 115, 157-58).
McConkie y Ostler escribieron que tal explicación es simplemente ficción creada, con el propósito de degradar a José Smith y para debilitar la validez de las revelaciones que recibió después de traducir el Libro de Mormón. Las seis razones que dieron sobre esta afirmación se listan a continuación.
“Primero, por más de cincuenta años, David Whitmer directamente rechazó a José Smith, declarándole que era un profeta caído. Sin embargo, él nunca negó su testimonio del Libro de Mormón, él rechazó virtualmente todo lo demás asociado con el ministerio de José Smith y la restauración del Evangelio. Su rechazo incluyó ambos sacerdocios, Aarónico y de Melquisedec, los cuales fueron restaurados durante el tiempo que el Libro de Mormón estaba siendo traducido y, por supuesto, las revelaciones que eventualmente constituirían el libro de Doctrina y Convenios.
“Segundo, de acuerdo al relato de David Whitmer de cómo fue traducido el Libro de Mormón, José Smith fue un instrumento de transmisión, mientras que la traducción dependía únicamente del Señor. Esto es simplemente una reflexión del concepto del dictado divino, el cual sostiene que cada palabra de escritura viene de Dios mismo. Si el relato de David Whitmer fuera aceptado, la revelación también incluye ortografía y puntuación. Este concepto está en contra con la explicación que se encuentra en Doctrina y Convenios 8 y 9, la cual detalla cómo viene la revelación. Al respecto, Richard Anderson comentó que Whitmer, ‘después de décadas de reflexión fuera de la Iglesia, concluyó que ninguna modificación en cualquier revelación sería posible realizarse. Esta postura tan rígida de estas revelaciones, concuerda con su postura tan rígida del origen del Libro de Mormón’ (”By the Gift and Power of God,” página 84). En contraste, Brigham Young observó, ‘Si el Señor enviara un ángel a reescribir la Biblia, en muchas partes ésta sería muy diferente de cómo es ahora. Me atrevería a decir que si el Libro de Mormón ahora fuera reescrito, en muchos casos diferiría de la presente traducción’ (Journal of Discourses, 9:311).
“David Whitmer muchas veces dijo que si una palabra estaba mal escrita, el traductor no podía continuar hasta que la palabra había sido corregida. Esto difícilmente permite los 3,913 cambios que han sido hechos, entre la primera edición del Libro de Mormón y la presente edición en uso.
“Tercero, si el proceso de traducción fue simplemente un asunto de leer de una piedra de cristal en un sombrero, seguramente Oliver Cowdery pudo hacerlo tan bien, si no mejor, que José Smith. Después de todo, Oliver era un maestro de escuela. ¿Entonces cómo nos explicamos de la incapacidad de traducir de Oliver? Además, referente al uso de un sombrero en la traducción, William Smith, el hermano de José, explicó que el Profeta usaba el Urim y Tumim asegurados al pectoral por una varilla que sostenía el juego de piedras de cristal en los aros de un arco ante sus ojos. ‘El instrumento causó una presión en los ojos de José, y él a veces recurría a cubrir sus ojos con un sombrero para evitar un poco de luz’ (Smith, “Rod of Iron” páginas 1, 3 [February 1924]:7).
“Cuarto, José Smith repetidamente testificó que volvió a tener las planchas y el Urim y Tumim. Además testificó que él tradujo de las planchas por medio del uso del Urim y Tumim.”
“Quinto, David Whitmer dio relatos inconsistentes del instrumento usado para traducir. Thomas Wood Smith, en una respuesta publicada sobre una entrevista que tuvo con David Whitmer, quien le dijo que José Smith usó el Urim y Tumim en la traducción del Libro de Mormón, escribió, ‘Cuando leí por primera vez el artículo del señor Traughber en el Herald del 15 de noviembre, pensé que no me percataría de su ataque, porque creí que la Iglesia consideraba mis declaraciones justas y verdaderas desde el punto de vista de otras personas, cuando tuviera ocasión de usarlas, daré esta repuesta únicamente: Que a menos que mi entrevista con David Whitmer en enero de 1876 fuera un sueño, o que mi entendimiento del inglés falló completamente, creí desde aquel entonces hasta hoy, que él dijo que José tuvo y usó el Urim y Tumin en la traducción de las inscripciones en referencia. Recuerdo estar más satisfecho con esa declaración, que con lo que oí del uso de la “piedra de cristal”. A menos que yo haya soñado la entrevista, o mi memoria falló en recordar la ocasión, él describió la forma y tamaño del mencionado Urim y Tumim. La propuesta más cercana a retractarme del testimonio que di…públicamente en muchos lugares en un estrado desde enero de 1876, hasta ahora, es, a menos que haya entendido completamente mal al ‘Padre Whitmer’ en este punto, él dijo que la traducción fue hecha por medio de la ayuda del Urim y Tumim. Si él dice que no pretendió transmitir esa impresión en mi mente, entonces digo que me lamento que lo malentendí, y sin querer lo tergiversé. Pero lo que le entendí, frecuentemente todavía lo afirmo” (como se cita en Cook, “David Whitmer Interviews,” página 56).
“Finalmente, el testimonio de David Whitmer sencillamente no concuerda con el patrón divino. Si José Smith tradujo todo lo que hay ahora en el Libro de Mormón sin usar las planchas de oro, nos tendremos que preguntar porqué las planchas eran necesarias en primer lugar. No hay que olvidar que la posesión de las planchas colocó a la familia Smith en peligro considerable, causándoles muchas dificultades. Si las planchas no fueron parte del proceso de traducción, no hubiera sido el caso. También tenemos que preguntarnos porqué el Señor mandó hacer un duplicado de las planchas de Lehi a los escritores del Libro de Mormón. Esta precaución – que se compensó con la pérdida de las 116 páginas – tampoco habría tenido sentido. Además, nos preguntaríamos porqué fue necesario que Moroni instruyera a José cada año, por cuatro años, antes que se le confiaran las planchas. Nos preguntaríamos porqué fue tan importante para Moroni mostrar las planchas a los Tres Testigos, incluyendo a David Whitmer. Y ¿por qué el Señor dejó que el profeta mostrara las planchas a los Ocho Testigos? ¿Por qué todo este alboroto si el profeta realmente no tenía las planchas y si no fueron usadas en el proceso de traducción? Lo que nos está pidiendo David Whitmer que creamos, es que el Señor hizo que Moroni sellara las planchas y los recursos con los cuales serían traducidas, cientos de años antes que llegaran a la posesión de José Smith y entonces, decidió que el profeta usara una piedra de cristal encontrada mientras cavaba un pozo, así que ninguna de estas cosas serían necesarias después de todo. Nos preguntaríamos, ¿realmente es esta una explicación creíble sobre la manera que funciona el cielo?” (Revelations of the Restoration, páginas 95-98).
El élder Joseph Fielding Smith, quien más tarde llegaría a ser presidente de la Iglesia, tuvo profundos sentimientos en contraste a lo que Robert y Whitmer dijeron concerniente al proceso de traducción.
El presidente Smith se apegó al relato dado por José Smith y Oliver Cowdery. Escribió:
“Aun cuando algunos escritores han dicho que el profeta José Smith usó una piedra del vidente parte del tiempo en su traducción de los anales, y la información indica el hecho de que efectivamente tuvo en su poder tal piedra, no hay ninguna declaración auténtica en la historia de la Iglesia que manifieste que se usó tal piedra en la traducción. Estos informes son simplemente rumores, y yo personalmente no creo que se usara esta piedra para tal propósito. La razón que doy para esta conclusión se halla en la declaración del Señor al hermano de Jared, la cual se lee en Éter 3:22-24.”
“Siento que es importante incluir aquí estos versículos del Libro de Mormón, a fin de mantener estas declaraciones del élder Smith en el contexto adecuado.”
“Y he aquí, cuando vengas a mí, las escribirás y las sellarás a fin de que nadie pueda interpretarlas; porque las escribirás en un lenguaje que no se podrá leer.”
“Y he aquí, te daré estas dos piedras, y también las sellarás junto con las cosas que escribas.”
“Porque he aquí, he confundido el idioma que escribirás; por tanto, haré que en mi propio y debido tiempo estas piedras clarifiquen a los ojos de los hombres las cosas que tú escribirás.”
El presidente Smith continuó, “Estas piedras, el Urim y Tumin, que se dieron al hermano de Jared se preservaron para este propósito mismo de traducir los anales, tanto de los jareditas como de los nefitas. Además, Moroni recalcó al Profeta el hecho de que se daban estas piedras precisamente para tal propósito (véase José Smith – Historia 1:34-45). Difícilmente parece razonable suponer que el Profeta se valdría de algo evidentemente inferior en estas circunstancias. Es tan fácil que una historia de tal naturaleza se difunda debido al hecho que el Profeta poseyó una piedra del vidente, que bien pudo haber usado para otros propósitos” (Smith, Doctrina de Salvación, 3:212-13).
La historia entonces, de la piedra en el sombrero es muy parecida sólo a esto – a una historia. No hay evidencia concluyente que José Smith usó ese proceso en la traducción del Libro de Mormón. Se tiene, sin embargo, evidencia que José Smith poseyó una piedra de cristal y que le dio la piedra a Oliver Cowdery. David Whitmer declaró que después de la muerte de Oliver Cowdery en 1848, Phineas Young, hermano de Brigham Young, recibió la piedra de cristal de parte de la viuda de Oliver, mientras la visitaba en Missouri. Él a su vez, a su regreso a la Ciudad del Lago Salado, dio la piedra a Brigham Young. La piedra permanece en poder la Iglesia desde ese tiempo (véase Book of Mormon Reference Companion, página 712).
sinceramente Misrahi Helaman M. V.
Helaman.
No habla bien de ti el que taches de apostasia aquello con lo que no estas de acuerdo o simplemente desconoces.
Sin ponerme a apoyar la version de este articulo dado por Stephen Ricks, si tengo que mencionar que dificilmente una persona como el podria escribir algo con el espiritu de apostasia. El profesor Ricks es profesor de Hebreo en la BYU, fue presidente del instituto de estudios mormones de la BYU, Farms, actualmente Maxwell Institute, una academia que tiene todo el respaldo de la Iglesia, y por cierto es un miembro activo de la Iglesia.
Todas las citas que aparecen en este articulo son veridicas, e inclusive, por ejemplo la parte del sombrero, fue dicha en un discurso por el elder Russell M. Nelson. Dirias que el esta dando doctrina apostata?
Finalmente, de mi estudio personal, ni McConkie, ni su hijo, ni menos su fuente primaria, Joseph Fielding Smith, los considero como fuentes muy confiables respecto a historia de la Iglesia, debido a que sus escritos son a mi parecer, muchas veces escritos en una vision muy sesgada. Sobre todo JF Smith (en sus libros doctrina de salvacion) solo comenta los autores y relatos que apoyan su vision e ignora completamente lo que no le parece, tachandolos de rumores sin fundamentos o “no es evidencia”. Me costo bastante tiempo darme cuenta que si existia evidencia muy solidad, aceptada por muchos otros eruditos de la Iglesia los cuales tomaban una posicion bastante mas centrada. No es mi impresion, sobre lo que he leido, de los autores anteriores.
De todas formas, y finalmente, es un tema abierto, en el cual hay mucha informacion disponible y se puede llegar a muchas conclusiones distintas a base a esto, cada una de las cuales puede ser valida o no, sin embargo llegar y tachar de apostasia informacion que o no compartes o peor aun, desconoces, de buenas a primeras (a pesar del solido fundamento y curriculum de los autores) simplemente no habla bien de tu capacidad de criterio.
Saludos atentos
@ Admin (como aclaracion y con mucho respeto querido hno.)
¡No hay evidencia CONCLUYENTE que José Smith usó ese proceso en la traducción del Libro de Mormón. Se tiene, sin embargo, evidencia que José Smith poseyó una piedra de cristal! si lees los pasajes relacionados a las escrituras te daras cuenta que la suposición sobre “la piedra de cristal” es solo eso: suposiciones. ¿Hay evidencia de José Smith aclarando que uso la piedra de cristal en la traducción?. Y podría decirlo El profesor Ricks y aun los mas grandes eruditos … pero sino va de acuerdo con las escrituras entonces no debe ser totalmente creible … sobre si desconozco del tema, reservo mis comentarios, pero si fuera asi, lo mismo puedo comentar de ti, ¿como puedes afirmar algo si lo desconoces? ademas ¡las cosas espirituales se han de discernir espiritualmente! considero que en muchos temas se habla por ignorancia y no por conviccion, mi humilde opinion es que el Libro de Mormon no fue traducido incuyendo una piedra de cristal y ¿sabes porque? por que no existe evidencia en las escrituras ni de parte de José Smith u Oliver Cowdery diciendo lo contrario, no es mi opinion lo que digo sino basado en las escrituras. ya es muy diferente si tu no consideras como evidencia lo que dicen las escrituras en relacion a la traduccion del libro de mormon. y todo lo que se diga sobre la traduccion del Libro de Mormon por medio de la piedra de cristal, seran solo OPINIONES venga del erudito que lo diga porque no se basan en las escrituras.
tambien debes de entender que:
The views expressed in this article are the views of the author and do not necessarily represent the position of the Maxwell Institute, Brigham Young University, or The Church of Jesus Christ of Latter-day Saints.
Helaman.
No hay evidencia concluyente ni de que fue, ni de que no fue utilizado. El articulo comienza claramente con que el proceso no se conoce a cabalidad y se dan algunas luces llegadas por el estudio del autor basado en lo que actualmente sabemos por testigos y documentos al respecto.
Es evidente que puede haber muchas interpretaciones al respecto. Para mi, es claro que tu argumentacion es muy basada en Doctrina de Salvacion, de Joseph F. Smith quien desarrolla la misma argumentacion. Asimismo, mi entendimiento es que los puntos presentados por Ricks no entran en contradiccion con las escrituras, y aun mas, la argumentacion que sostienes basada en la idea de Joseph F. Smith es en mi opinion muy sesgada basada mas en sus creencias que en argumentos y documentos tangibles; de hecho, creo firmemente que es errada la aseveracion de Joseph F. Smith de que otros metodos son “rumores” y que tienen “falta de pruebas” y “argumentos tangibles” y que esto es asi por que “las escrituras lo dicen” asi que debe ser asi…. Que el no las halla considerado (por que no iban con su pensamiento) no quiere decir que no existiesen otros antecedentes. Asimismo, lo que señalas, lo dices diciendo “no es mi opinion sino lo que dicen las escrituras”, pues bien, ahi se cae en un juego de interpretacion sin sentido por que yo leyendo las mismas escrituras, no veo contradicción en lo anterior o que implique claramente lo que se quiere interpretar. Por tanto lo que te quiero hacer ver, es que las escrituras no afirman feacientemente ni una ni otra cosa, lo que si lo hace, es la interpretacion que uno le da, y eso si es parte de nuestros conceptos y opiniones.
Y de hecho ese es mi punto de mi observacion. Personalmente me parece de extremo mal gusto y falta de educacion el argumentar una creencia u interpretacion y tachar a la otra como “Apostasia”. Me refleja, insisto, falta de criterio, y falta de conocimiento. Noto que tu posicion es fuertemente basada en doctrina de salvacion y todos sus derivados mcconkianos. Yo no estoy de acuerdo con esa interpretacion, pero la respeto. Solicito el mismo respeto por todas las ideas diferentes respecto a puntos que NO, y repito, NO han sido aclaradas feacientemente por la organizacion formal de la Iglesia.
Es innecesario poner que el tema de que las opiniones son las del autor y no son oficiales. De hecho, es asi como nosotros tomamos estas cosas y las publicamos para que la gente pueda leerlo, y tomar lo “bueno” para ellos. Pero decir que algo no es oficial (como todos lo tomamos) es muy muy distinto a tacharlo de “apostasia” (que desagradable palabra, entreparentesis, para aplicar a otros) simplemente por que nosotros no compartimos su punto de vista. Constituye una falta de educacion y respeto para muchas personas, en especial para un autor que se ha esforzado en pasar horas estudiando con absoluta buena fe y devocion (o acaso puedes probar que el es solo un “erudito” y no un santo de los ultimos dias como todos nosotros, que trata de estudiar basado en la guia del espiritu?), y, para que estamos con cosa, apoyado en su estudio (independiente de sus conclusiones) por organismos de la Iglesia. Ademas…. podemos decir lo mismo de todas las citas que has puesto, ninguna de ellas, deja de ser lo mismo, las “views” del autor y no necesariamente la posicion de la Iglesia, y no por ello dejan de ser respetables, probables, y todo lo demas.
Saludos
@ admin
con todo respeto considero que lo estas tomandolo personal por la forma en como te expresas, y si piensas que mi opinion se basa en doctrina de salvacion, sin comentarios, solo agradesco el espacio que tienes para compartir el evangelio de Jesucristo eso es muy bueno, asi deberiamos ser todos los miembros. Asi que considero de mi parte no tocar el tema de la “piedra de cristal” y pido disculpas si la palabra apostasia fue muy dura, diculpame. es grato charlar con alguien que conoce y posee un testimonio del Evangelio Restaurado. Que tengas un excelente dia. seguire viendo tus posts.
Sinceramente Misrahi Helaman V. C.