Aveces pienso que fue solo un par de años atrás cuando estaba recorriendo esas calles y conversando con esa gente, y sin embargo, ya son casi 15 años desde que volví de la misión. Me pasa lo mismo con el mba, a veces veo noticias de phoenix (o videos de china, india u otros lugares) y le cuento a los niños de cómo era el calor en estas fechas o como era recorrer esas ciudades y entonces me fijo que ya van a ser 10 años. La mica, quien recién nacida fue la que nos acompañó en esa aventura, está a pocos meses de llegar a su primera década. Los niños crecen y aunque uno no se da cuenta, los años pasan y pasan.
Y por que hablo de esto?. No se, posiblemente nostalgia de las dos cosas más entretenidas que hice en mi juventud. Si, tambien la pase super bien en la universidad, la secundaria y en instituto (de verdad, super bien), pero por algún motivo esas cosas me parecen lejanas, a diferencia de la misión sur y el periplo mundial del mba. Posiblemente el punto que marca la diferencia es que lo mejor de mi vida comienza justo después de esas experiencias.
Y que puedo decir 10, 15 años después de ellas?. Primero que nada, es que estoy agradecido. Dado que lo primero es lo primero, es que doy gracias a la misión por haberme transformado en un converso. Si, antes de la misión, “creia” en el mormonismo, pero fue la misión la que me convirtió. Gracias a jóvenes como elder gonzalez, martin, christensen, karim o ese idiota del obregón, pude conocer el verdadero amor por los amigos y por la obra. Nunca antes (y creo nunca después) lloré por un amigo o simplemente por las personas. A pesar de los 19 o 20 años en la Iglesia, nunca antes de mi misión había sentido la realidad de Dios. Aproveche a concho mi misión (hasta el ultimo dia) e hice experimentos como nunca para poder tratar de entender la religión teórica de libros y manuales, en una religión práctica, en acción y consecuencia, en cosas reales y cotidianas, en experimentar cosas que aparecían en las escrituras y literalmente se cumplían y vivian. No tengo la menor duda, todo lo bueno que me ha ocurrido después, en especial mi compañera, son de una u otra forma consecuencias de aquellos dos años.
El mba también fue fantástico. Tuve la oportunidad de aprender otro idioma, vencer muchos de mis temores (en otros idiomas), y viajar, viajar mucho, a lugares donde ni siquiera podía leer lo que decían los carteles al estar en caracteres thai, árabes o chinos. Además de eso pude dar un giro a mi carrera y moverla al área que más me interesaba y así, poder no solo trabajar o hacer clases, sino que disfrutar lo que hago. Sin dudar, aquel postgrado fue una gran pero gran bendición para mi vida.
Sin embargo a veces me causa impresion escuchar que el que un hombre haya sido misionero o no no causa gran diferencia (e inclusive, que es un “mal consejo” el buscar un RM como pareja), no se, no se puede generalizar. Ciertamente hay misioneros retornados que se han equivocado y también hay muchos buenos hombres que no sirvieron misión. Pero para mi hay un antes y un después. La persona, esposo, padre y profesional que soy, es muy distinto a la que pudo haber sido de no haber tenido la oportunidad de servir en la gran misión sur.
Esta semana termine un hito muy importante para la organización para la que trabajo. Posiblemente se trate de uno de los logros más importante de mi carrera y me llevó meses planificarlo, generar estrategias, coordinar gente y todo eso para lograr el gran objetivo. Lo entretenido fue que a pesar de toda mi preparación, experiencia y estudios, lo que marcó la diferencia fueron las palabras, la confianza, el creer y ser creíble, el expresarse en el momento correcto. Cosas de las relaciones humanas que no aprendí directamente haciendo el mba, si no que sirviendo en pequeños pueblos de mi misión o en la iglesia.
Una anécdota: hace unas semanas me tocó exponer un tema frente a trabajadores de todo nivel, desde gerentes hasta obreros. A mi se me hace sencillo exponer en forma simple, directa y potente y que todos entiendan. Al terminar se me acercó un amigo (ingeniero y también ex misionero) y me dijo “mis compañeros me dicen que eres muy creíble, que dan ganas de seguirte, que se te sentía diferente a los otros pero yo se (riéndose) cual es el truco: lo aprendiste en la misión”. Y es verdad, y nuevamente me rei al acordarme de esos dos años y como aprendimos a sonreír y a abrir nuestro corazón para con sinceridad tocar a otros (y comprometerlos, y hacerlos actuar).
En unos dias viajare junto a mi familia y tendre la oportunidad de reunirme con algunas de las familias que conocí en esos años. Va a ser una gran alegría para mi. El tipo ese flaco, impaciente y huraño se ha transformado en hombre ya más maduro, un esposo que ya cumplió una década y en el padre de cuatro niños. Tengo muchas aventuras para contarles, historias de cuando no entendía nada las primeras semanas en eeuu, o cuando sali arrancando de un tuctuc de la muerte por las calles de Bangkok, o esa cuando conduje todo un dia sin gps para llegar a Nauvoo, ja, tengo historias por montones, pero algunas de las mejores historias fueron las que ocurrieron hace 15 años en sus pueblitos, o quizás, quizás no fueron tan buenas historias (comparadas a esa cuando me fueron a dejar mujeres en un hotel en cambodia, ajajajaja, cool story bro), pero si, sin duda, casi cada cosa buena que me ha ocurrido después (o idea que he desarrollado), tanto familiar, espiritual o laboralmente, ha sido para mi, una consecuencia o algo que aprendí en mi misión. Y eso, ha sido sin duda mejor que cualquier mba para mi.
Me hiciste recordar mi misión…
Hola amigo:
Comenté hace unas semanas atrás, que tuve un reencuentro con cuatro ex misioneros en la ciudad de Luján.. Fue casi como un “engaño” de ellos (que les estoy agradecido) llevarme nuevamente a la iglesia, y participar de una conferencia de estaca.
Nunca había regresado a un lugar donde hice la misión, por donde estuve caminando en busca de compartir el evangelio.
En esa reunión, era un acontecimiento, porque los misioneros (ex) que estaban conmigo, habían caminado por primera vez en esa ciudad buscando enseñar el evangelio restaurado…. y fue uno de ellos que eligió el lugar hace 40 años el terreno donde hoy se levanta el centro de estaca.
Ese día el hermano Marcelo Cardús, me reconoció como un misionero que estuvo en su ciudad cuando él tenía 12 años…. al terminar la reunión del sábado, se me acercó, y me preguntó cuál había sido uno de mis destinos, al que le dije “Loma Hermosa”…. y dijo: ¿Entonces fue usted quien abrió ese lugar?…. ¡siiii le contesté!
El día domingo 16 de Julio, volveré al último lugar que pasé por la misión… Nunca antes había visitado miembros o lugares misionales, a pesar que estoy a 230 km…. de la zona que hice la misión.
En ese lugar comencé con una “escuela dominical de hogar”…. y ahora hay una capilla e hijos e hijas de familias que bauticé…. y ellos me esperan para que les relate cómo fue los comienzo de sus padres en el evangelio… ls charlas, los desafíos, y la conversión de ellos (algunos pasaron por el templo)…
Hermano administrador:
Ya hace bastante que me encuentro con ustedes participando…. y el haber tocado éste tema, me lleva a contarles algo.
Fui muy conmovido los días que estuve en Luján, sentí el interés de mis compañeros de misión, su amor y testimonios. Y me di cuenta que tengo las “huellas de haber servido al Señor, en mi alma”… Y que ellos supieron responder la pregunta del Señor: ¿Dónde está tu hermano?
Y “ellos” fueron mis guardas….. porque supieron mantener ese cuidado y constancia de estar…. aún con “silencios”…. y me esperaron que nuevamente sienta lo que una vez sentí.
Así como en Cumorah…. con algunas negaciones de mi parte, con ataques, con desacuerdos y deseos de demostrar errores, en todo….. me dieron lugar…. me aceptaron, me tuvieron paciencia.
En cumorah, encontré “guardas”…. que el Señor ponía en mi camino….. Él me esperaba y esperó….. hizo que todo llegara a un camino….. el que nunca tuve que dejar… pero me sirvió.
Recibí la noticia del hermano Marcelo Cardús (enviada por uno de los misioneros de USA) de que mi nombre no a sido borrado de la membresía de la Iglesia..
No podía de parar mi llanto…… la cosecha de la misión me daba sus frutos…
Por eso hermano, ese viaje que hará, encontrará algunas respuestas y bendiciones del Señor, por lo que diste en tu juventud.
Yo recuperé la esperanza, y la fe de que mi Padre me ama.
La misión, es una parte del cielo en la tierra, es una parte de la organización de los cielos entre jóvenes que brindan a dar el mensaje del Salvador….. que comparten esa sociedad de cómo es vivir en los cielos…. de encontrar amigos, y recibir conocimiento del mensaje de Cristo.
Gracias a Cumorah…. A Francisco…. Luis….. Selu…. Javier – Yomero… y algunos hermanos argentinos…
Mi regreso es en poco tiempo…. Y dos gracias a esos jóvenes adultos que mantenemos es comunión de la misión.
Iba a contarles después del 16 de julio…. pero tu tema adelantó mis deseos.
Gracias por todo, queridos amigo. (después les cuento cómo me fue en Loma Hermosa)
David muchas gracias por tu valentía y humildad al abrir tu corazón y compartir esta experiencia, tus ideas y sentimientos, en verdad gracias ha sido para mi muy instructivo y edificante…
Vino a mi mente esta escritura del Nuevo Testamento que me gusta mucho…
“Pero en cuanto a vosotros, oh amados, estamos persuadidos de cosas mejores que pertenecen a la salvación, aunque hablamos así.
Porque Dios no es injusto para olvidar vuestra obra y el trabajo de amor que habéis mostrado hacia su nombre, habiendo ministrado…
Pero deseamos que cada uno de vosotros muestre la misma diligencia hasta el fin, para el pleno cumplimiento de la esperanza…” (Hebreos 6:9-11)
El Señor no se olvida de Sus siervos…
Aprovecho para pedirte disculpas si en algunas ocasiones fui brusco al intercambiar algunas opiniones contigo, espero me disculpes.
Me alegra mucho tu regreso hermano… estoy a tu servicio.
buenas experiencias de vida David, gracias por compartirlas, que tu viaje de vida te de mas alegrías y ya sabes que en Mex. tienes un amigo o varios diría yo, las distancias pueden ser largas pero la amistad no tiene limites ni fronteras, conciudadanos de los santos, siempre seras bien recibido amigo…
Un puente virtual creado por el admin de Cumorah y cultivado por el deseo de amistad, la vida nos da pruebas constantes y leer tus ultimas experiencias me es motivo de alegría…
Un saludos a todos tus compañeros misionales, y tus áreas de misión; y por supuesto a Pergamino Argentina, la tierra de un gran amigo….
Gracias amigo….
Tu has sido el que recibió mas de una carta, de mis angustias, y de mis malos deseos con la iglesia.
Pero fuiste paciente y en ocasiones silenciabas, o me dabas alaguna ayuda.
Tu conoces mas que mucho de mi vida…. te la he contado, y fuiste guarda mío.
Selu, tampoco ha dejado de hablar conmigo…. se cosas de su vida que me han demostrado valores…. y de pesares que supo salir adelante.
Esas cosas quedaron en mi inconsciente, ese lugar que está ocupado por recuerdos y herramientas para volver…. y en el momento que menos pensaba, y por el testimonio de un amigo de USA, tocó mi corazón…
Debo remediar tanta confusión que ocasioné en otras personas….que el Señor me dará los medios y formas para lavar y enmendar, mis errores.
Gracias Francisco.
Un abrazo.
David veo mi nombre mencionado en tu comentario, sinceramente me sorprende y espero no haber sido la piedra los frijoles pues últimamente no soy muy espiritual que digamos. Sin embargo se que la Iglesia es verdadera y que Jesucristo es el gran mediador y que el evangelio es verdadero, de hecho creo que es tan importante que la transformación que viene comúnmente por medio de él es imperceptible en muchos casos por ser tan íntima y profunda.
Muchas felicidades David, creo que has tomado la mejor decisión para ti porque has sentido su voz hablándote y has respondido y por eso te ama. Que bello es ese sentimiento y benditos sean esos exmisioneros que te buscaron y te amaron como el Señor lo hace. Saludos y cuéntanos tu experiencia después del evento.
Saludos.
La puerta está abierta, pasa querido hermano a sentarte a la mesa de tu Padre y Señor.
Tu relato me conmovio David , un abrazo
Qué lindo lo que contás David.
De la familia cardum conocemos a Walter uno de los hermanos que vivió bastantes años por acá.
Acabo de leer tus palabras Terminando de cenar con mi familia.
Gracias por compartirla.
Mi familia Te mando un abrazo!!!!
Y así vemos que el Señor nunca se olvida de Su pueblo, y qué Él siempre cumple sus promesas. He aquí, Su brazo aún está extendido, y la mesa dispuesta, y nos invita a comprar leche y miel sin dinero y sin precio. Bienvenido otra vez, David.
Gracias…. gracias a todos, y soy yo el que se disculpa.
Gracias por la escritura Luis.
Gracias Leya, y SergioMLH….
Todos fueron mis “guardas”….
Y por algo las cosas son y deben ser así….
Un saludo a todos.
Te amo David
¿Porqué pides disculpas? Entre hermanos el amor premia y estamos buscando crecer juntos. Mas bien que gran bendición ver regresar a un hijo de Dios y hacernos partícipes a pesar de las distancias…
Lo dije, porque Luis Castillo me pide disculpas…. por eso digo lo que dije. Y es lo menos que puedo hacer, después de haber intentado torcer el pensamiento de muchos…
“Cuando el hijo pródigo, volvió a su hogar…. llegó muy dolido, con un estado de vergüenza ante su padre… no por haber faltado a algún mandamiento, o por no haber vivido bajo la ley de Moisés por un tiempo…. sino por haber echo que su padre sufriera, que sintiera dolor de que tal vez….”él, nunca regresara”. ¿Sabemos como se siente un padre cuando un hijo, se aleja?…. Es un dolor emocional muy fuerte, el alma no se calma tan fácilmente… Por so el hijo sabía lo que había echo. Lo más hermoso, es que el padre, no le hizo ninguna pregunta sobre su existencia fuera del hogar… solo lo abrazó, y lo besó. Creo que ese hijo cambió totalmente.
Y así es nuestro Padre, sin juicios sobre nuestra vuelta, pero con mucho amor nos recibe.
El hermano criticó el regreso del hermano extraviado.. Y se lo dijo a su padre.
Ustedes en Cumorah, me “recibieron sin críticas”, sin juicios…. solo se que están felices, y eso ahora me hace feliz a mi también…. queridos hermanos en la fe.
(Debo enmendar todo lo que hice, pero lo lograré)
Saludos.
Dios te ayudara a regresar y si lo deseas de corazón puedes ser un poderoso instrumento en las manos de Dios… así fue con Pablo, con Alma hijo y con los hijos del rey Mosiah…
Gracias Luis….
Estaré abocado a ese cambio.
Muy buenas reflexiones admin, la misión te deja mas de lo que tu le das a ella, aun sin pedirlo, claro , claro el esfuerzo del trabajo arduo en la misión es importante; gracias por compartir este post y ser un puente virtual para conocer y ser conciudadano de los santos…
linda la foto de Cambodia..jejeje…
Yo conoci al ADMIN joven uraño y desinteresado en la iglesia y conozco su origen lleno de necesidades junto a una familia fiel de la iglesia que se preocupaba por el, que bueno saber que la Mision cambio tu forma de pensar y ahora eres un padre de familia que siendo bien sincero nunca pense en ese tiempo lo serias, te felicito y aun que me separan de ti no solo años sino la forma de pensar nos une el amor hacia el evangelio y la familia, saludos Admin.
churra, jajajajaj, mi nube de humo te envolvio mas de lo que me esperaba, porque la verdad, tu descripcion no me describe muy bien en esos tiempos.
Entiendo eso si que es lo que veias (que en eso estoy de acuerdo, ya que no me interesaba ‘mostrarme’ a quienes no me interesaban… como por ejemplo los misioneros… y eramos pobres, claro, pero eso de “lleno de necesidades”, ehmmmm, seriusly?), pero, quizas sirva para darse cuenta que los prejuicios en la gente, hacen que juzguen de maneras incorrectas. Mas adelante les podre comentar una anécdota cuando yo tambien he caido en eso.
saludos
Que modesto
Hace un tiempo atrás el hijo de un amigo que dudaba en salir o no a la misión me preguntó porque yo lo había hecho. Le contesté que esos dos años eran quizás la única cosa de largo aliento que había hecho en mi vida pensando más en los otros que en mi mismo. Las gente estudia, trabaja, forma familia, incluso obedece los mandamientos pensando en que es bueno para si mismo o para cumplir sus metas personales.
Pero durante su tiempo de misionero(a) uno sale cada día de la pensión pensando en enseñar, ayudar o servir a los demás. Eso le acerca mucho a las personas y le ayuda a desarrollar una verdadera empatía por ellos. Si a eso le sumas la compañía constante del Espíritu Santo tendrás una experiencia difícil de borrar.
Ver a las personas literalmente cambiar sus vidas frente a tus ojos es una experiencia inefable, sentir su paz y gozo es indescriptible y saber que eres parte de eso te hace sentir humilde y formar lazos muy fuertes con ellos.
Personalmente, lo que más recuerdo de mi misión (salí hace casi 30 años atrás) son pequeños gestos o detalles que marcaron mucho mi vida. Sería largo enumerarlos, pero son pequeñas cosas no grandes milagros. Muchas cosas sencillas y nobles.
Quizás la edad de los misioneros tenga que ver con eso, pienso que a un sujeto mayor lleno de experiencias, mañas, heridas y escudos le puede costar mucho mas llegar a sentir lo mismo que a un joven inexperto, inocente y sensible.
En fin, No sé que tienen esos años de servicio misional que marcan tan profundamente a la gente. Tengo amigos que hace muchos años que no se sienten muy lejos de la iglesia, pero que aun recuerdan con cariño esa etapa. Para algunos de ellos es casi como una marca que no pueden borrar, yo prefiero pensar que es una luz que nunca se apagará.
perdon … quise decir ” hace muchos años que se sienten muy lejos de la iglesia,” Sorry por el lapsus scribae.
Hey admi, uno de los programas más escuchados acá en méxico habló de la iglesia
http://www.marthadebayle.com/v3/radiov3/nospusimosserios/clases-de-religion-mormones/
Que excelente este artículo Admin. Me siento muy identificado con lo que escribiste, porque la misión ha sido una de las experiencias que más me ha servido en la vida. “Eso que no se aprende en la Universidad”, sin duda se puede aprender en la misión.
Por mi trabajo me toca alegar ante tribunales de justicia, y claro, el contenido técnico de lo que digo lo aprendí en la universidad; pero la forma de decirlo, de captar la atención de los jueces y de impedir que no se duerman (que es lo común) lo aprendí en la misión. Es chistoso, mis performances ahora son para los pomposos jueces en lugar de los humildes investigadores, pero el mensaje más valioso y del que estoy 100% seguro era para estos últimos (no como el mensaje que a veces doy ante los Juzgados, donde ni yo estoy muy convencido de lo estoy defendiendo jaja) .
Ahora soy mucho más feliz que en la misión. Puedo hacer más cosas, y en lugar de despertar y ver en el dormitorio la cara fea de un compañero, veo ahora la de mi linda esposa. Sin embargo, gran parte de lo que soy, lo formé durante esos dos años. Y gran parte de los logros que he tenido, es por hacer las cosas que aprendí durante ese tiempo.
Recuerdo que mi presidente de misión dijo una vez que las bendiciones de servir la misión continuarían llegando por el resto de nuestras vidas, que él incluso ya edad, las seguía recibiendo. Me acuerdo de eso y no puedo dejar de pensar la tremenda verdad de sus palabras.
Hay muchas personas que continúan pensando que la misión es un retraso para los estudios y que eso afectará laboralmente en el futuro, pero hoy en un país donde la educación superior está masificada y hay un superávit de profesionales, el conocimiento de la vida y de las relaciones humanas que da la misión, pasa a ser una de las educaciones más valiosas para el trabajo.
Buen artículo.
Gracias .