(copypaste de un articulo de mayo de 2007)
Wow, esta es de esas noticias que nunca creí leer, y para los fundamentalistas, la leí nada mas y nada menos que en deseretnews.com.

En todo caso es taaaannnnn “interesante”, que la historia la pondré en “leer mas”. Enserió, yo estaba de lo mas bien estudiando, cuando dije “voy a leer las noticias 5 minutos” y he estado media hora leyendo asombradísimo la historia que les voy a contar.

Atención: La historia es para mayores, así que si haces click en leer mas, es bajo su responsabilidad. Ok?

Ya!, se acuerdan de todas esas historias increíbles de la misión de que algunas mujeres perseguían a los misioneros e inclusive trataban de pasarse muy de listas con ellos?. La verdad, algunas eran mas o menos ciertas, en mi misión pasaron algunas cosas raras, pero nada como lo que he leído.

Resulta que una mujer acaba de hacerse famosa por pagar 50.000 dólares en clonar su perrito que se le había muerto. Las noticias eran “que interesante, que raro, que blah blah blah”, hasta que alguien vio un alcance con su apellido, vio que trabajaba en teatro, y miro su cara, algo familiar a una famosa mujer de hace 30 años. Y las especulaciones comenzaron.

Ha sido tanto que además de deseretnews apareció publicado en Salt Lake Tribune, muchos diarios gringos e inclusive en The Times de Londres. Resulta que todos creen que la mujer es la famosa (bueno, allá, acá no tenían ni idea) protagonista de un caso que fue sensación mundial de una reina de belleza norteamericana que se volvió loca de amor por un misionero, así que no hallo nada mejor que secuestrarlo y luego de no poder convencerlo para casarse con ella…. violarlo (y en reiteradas oportunidades….). La versión de The Daily Mail de Inglaterra es cuando menos increíble, así que la voy a traducir hasta que se me revuelva la conciencia y vuelva a lo que estaba haciendo. Aun estoy sorprendido con la noticia. La traducción y los enlaces con fotos, en leer mas.

—comienzo de la traducción—-

Así¬ que, queridos lectores, vamos a hacer retroceder el reloj 30 años para Joyce y las sensacionales circunstancias de lo que se conoce como “el asunto del esclavo sexual Mormon”

Joyce McKinney nació en Avery County, Carolina del Norte, en agosto de 1949, la hija de dos maestros de escuela.

La primera vez que estuvo en los titulares, aunque los de su pueblo, fue en 1972, cuando fue coronada Miss Wyoming, pero al poco se canso del mundo de la belleza y la inscribió como estudiante de teatro en la Universidad Brigham Young, en Utah, el corazón de la America Mormona. La foto al lado es en una obra de teatro en BYU

Fue allí¬ donde conoció a Kirk Anderson, de 19 años de edad, 1.80, compañero de actuación de pregrado, el cual tenia siete años menos y era de una pequeña ciudad cerca de Salt Lake City. Hubo una breve affaire del cual McKinney mas tarde afirmo que había “descarriado a su bebe”.

Superado por su culpabilidad, Anderson, un Mormon devoto, al parecer solicito el asesoramiento de su obispo, el que le dijo que tenia que romper lazos con McKinney y alejarse de Utah.

Pero ella no estaba dispuesta a ser rechazada con tanta facilidad. Detectives privados fueron contratados para rastrear Anderson desde los EE.UU. a Ewell en el condado de Surrey en Inglaterra, donde en ese entonces el vivía trabajando como un misionero Mormon predicando de puerta en puerta.

En el verano de 1977, McKinney voló a Inglaterra con un arquitecto amigo llamado Keith May. Armado con un revolver de imitación, May se enfrenta con el ya de 21 años misionero Mormon cerca de las capilla de la Iglesia de Jesucristo SUD de Ewell y se lo llevo saltando (nota del traductor: DE VERDAD DICE ESO) a un coche en el que estaba esperando McKinney.

Dejado fuera de combate con cloroformo y escondido bajo una manta, el misionero Mormon fue llevado por unas 200 millas a Okehampton, donde sus secuestradores habían contratado a una cabaña de “luna de miel” del siglo 17 siglo por 50 libras por semana. McKinney dijo mas tarde que había empacado una nevera con la comida favorita de Anderson y que estudio el libro “La alegría del Sexo” en preparación de lo que estaba por venir….

May encadeno al preso a una cama. Durante dos días, McKinney trato de persuadir al misionero a casarse con ella y ser el padre de sus hijos. Ella llego incluso a leer las Escrituras con el en la cama. Pero cuando se dio cuenta de que esto no iba a resultar, McKinney paso al Plan B, así que se puso un vaporoso pijama transparente del tipo “se ve todo”, coloco un cassette de “música romántica”, y comenzó a “jugar” con Anderson. (Nota del traductor: Jugar es un eufemismo que puse para no traducir toda esa parte). Al ser arrestada ella alego que se trato de un juego de “dominación” efectuado con pleno consentimiento.

Anderson explico a un tribunal: “No me podia mover. Ella agarro la parte superior de mi pijama y lo rasgo de mi cuerpo hasta que yo estuve desnudo. Yo no deseaba que esto sucediese. Yo estaba muy deprimido y alterado después de haber sido forzado a tener relaciones sexuales”. Esta “violación” ocurrió en tres ocasiones.

En el acta judicial quedo constancia de que el pijama había sido de “color azul claro y sedoso”. Anderson también afirmo que había estado usando una especie de cinturón de castidad Mormon en la parte inferior de su cuerpo, el cual por desgracia, parece que no le sirvió de nada.

Temiendo que se mantendría preso por semanas Anderson prometio casarse con ella. Pero después de que ella aflojo sus cadenas, rápidamente escapo y se dirigió directamente a la policía. McKinney y May fueron detenidos en un control de carretera tres días mas tarde y acusados de detención ilegal y posesión de una imitación de arma de fuego. Finalmente McKinney paso tres meses en prisión preventiva en la prisión de mujeres de Holloway antes de ser puesta en libertad bajo fianza por razones de su falta de salud mental.

Ahora el caso, que ya se había convertido en una causa celebre en todo el mundo, estaba a punto de tener un nuevo capitulo con un sensacional giro. McKinney se reunió con su amigo May y la pareja huyo a Canadá, utilizando pasaportes falsos y disfrazados de mimos sordo-mudos. Mas tarde se alego que McKinney fue ayudada a escapar por su antigua jefa, una mujer irlandesa, que le entrego a ella material de un teatro del West End. Allᬠcompro las pelucas y gafas que posteriormente serian utilizadas en su huida de la justicia. Ahora una fugitiva internacional, McKinney reapareció mientras estaba alojada en el hotel Hilton en Atlanta, disfrazado de monja.

Al poco tiempo, la prensa comienza a entrevistarla regularmente y ella deja su disfraz en vista de toda su ganada notoriedad sexual hasta que las autoridades de los EE.UU. finalmente le atrapan y es detenida. Una frase para el bronce que dio a la prensa fue cuando en su declaración en la corte dijo que por amor seria capaz de “bajar esquiando el monte Everest desnuda con un clavel en su nariz” si Kirk Anderson se lo pidiese.

Una vez mas fue puesta en libertad bajo fianza y, ahora ya en 1979 – no había animo de parte de las autoridades de Reino Unido para pedir su extradición. McKinney, por su parte, presuntamente desaparecida en el mundo se torna cada vez mas desesperada por problemas sexuales, abuso de drogas y problemas psiquiátricos.

Pero, ella volvió a aparecer una vez mas en 1984, cuando fue detenida cerca del aeropuerto de Salt Lake City, donde Kirk Anderson -el Mormon que había secuestrado – se encontraba trabajando. En su auto, la policía encontró una cuerda larga, un par de esposas y detallados diarios con la actividad de Anderson: La implicación era evidente respecto a que ella estaba a punto de hacer un segundo intento de secuestro, pero ella no se presento a los tribunales y el caso fue abandonado.

De finales de los años noventa, McKinney se fue a Carolina del Norte, acosada por su mala salud y a menudo en una silla de ruedas, donde vive de los beneficios de una pequeña cabaña con solo tres caballos y un feroz y dedicado Pitbull llamado Burger. “Me encantan los pitbulls” explico, “Son animales simpáticos”. Los locales, que sabían de su interesante pasado, la trataban con recelo, si no con miedo. Tenia gusto por los litigios y se describió a si misma como “una mujer salvaje”. En un raro comentario acerca del asunto del Misionero Mormon, dijo en 1999: “Me encantaba Kirk y todo lo que realmente quería ver eran bebes de pelo rubio corriendo alrededor de mi casa” … “Nadie puede comprender lo que es perder el hombre que usted ama por razón de un culto y creo que eso son los Mormones. De regreso en Gran Bretaña [en aquel entonces] nadie sabia lo que era un culto.”

De May solo se supo que tenia una tienda de suministros de fontanería en California, mientras que Anderson era un agente inmobiliario en Utah y comprensiblemente, aun es renuente a hablar de sus infortunios.

[El resto del articulo habla de mas cosas de la mujer y del proceso de clonación del perro y como todos los datos apuntan a que la clonadora es la misma mujer de esta loca historia. Si creían que habían leído de todo en los diarios, vuelvan a considerar su supuesto. El articulo completo es el del daily mail]

Artículos relacionados:

http://www.dailymail.co.uk/A-cloned-dog-Mormon-mink-lined-mystery
http://www.timesonline.co.uk/tol/news/world/us_and_americas/article4476877.ece
http://www.sltrib.com/news/ci_10127466
http://www.deseretnews.com/article/1,5143,700249051,00.html]]>